La ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, eligió el municipio de San Cristóbal de La Laguna para presentar en Canarias el Fondo ZP de financiación municipal. Este fondo ha supuesto que para La Laguna se destinen por el Gobierno de España nada menos que 25,5 millones de euros. La mayor inversión directa que jamás ha recibido La Laguna de una administración pública. Un gesto de elegancia política, al elegir un municipio no gobernado por el PSOE, que sin embargo no ha gustado a CC. Algo absolutamente difícil de entender cuando el alcalde de La Laguna es de esa formación política y, lejos de disgustarse con la visita, pareció estar encantado. Es más, el encuentro se realizó en el modo y manera que el señor alcalde estimó oportuno.
Sin embargo al parecer esto no fue del gusto de CC, que se quejó, a través de don Javier González Ortíz, de no haber sido avisado de la citada visita. La queja, además de infantil, está completamente injustificada, pues resulta difícil de entender que un ministro del Gobierno necesite pedir permiso al Gobierno Autonómico de turno para visitar un municipio de su territorio. Debería CC desatascar sus canales de comunicación, pues el alcalde conocía la visita desde hacía días y tampoco parece se lo contó a sus amigos del Gobierno de Coalición Canaria, seguramente para que no le estropearan la foto.
Pero, sobre todo, la reacción de CC parece más una pataleta pueril que una reacción política meditada, sobre todo teniendo en cuenta que el Gobierno Autonómico no se ha destacado por sus actuaciones anticrisis. En todo caso pone de manifiesto un concepto equivocado del municipalismo como una administración supeditada a la Comunidad Autónoma, lejos del concepto de autonomía local que permite a los ayuntamientos relacionarse directamente con las administraciones sin la tutela autonómica.